Si has llegado hasta aquí es porque a) utilizas las redes sociales y b) es posible que estés compartiendo en ellas contenido relacionado con tu profesión. La pregunta de si se debe compartir contenido profesional mezclado con el personal en las redes sociales me la hacen con cierta frecuencia, así que me he decidido a escribir un post sobre el tema por si os aclara algo.
Sé que separar vuestro perfil profesional del personal os da pereza por aquello de controlar dos cuentas, así que os voy a intentar dar motivos para que al menos lo consideréis como propósito de año nuevo.
¿Qué es el contenido personal en redes sociales?
Más allá de la separación de perfiles, quiero centrarme sobre todo en la separación de temas. Los temas personales son aquellos que le contarías a una amiga o departirías en la barra de un bar, en una terraza o le contarías a tu médica si hay confianza.
Un tema personal puede ser que se ha averiado el metro, que han bajado el precio de la caballa en tu supermercado o que tu hijo es el mejor porque comparte todos sus juguetes. En los temas personales, el tono es más distendido y sobre todo son más variados.
Cuando estamos compartiendo contenido personal podemos sentirnos libres de expresar opiniones fuertes (como siempre, respetando las reglas de educación y sin faltar al respeto a nadie a ser posible) y estamos expresando la parte más auténtica de tu «yo». Ojo, no quiero que con estas palabras interpretéis que se puede ser faltona cuando estás compartiendo contenido personal, pero digamos que eres más libre tanto en el uso del lenguaje como en los temas que abordas.
El contenido profesional debe ser profesional
Sé que es una perogrullada lo que acabo de decir, pero si no pierdes de vista el objetivo de tus comunicaciones de marca, es fácil clasificar cuáles de tus actualizaciones corresponden a tu perfil profesional.
El contenido profesional atañe a tu marca o a tu página web y tiene que tener un tono más elevado. Cuando estés compartiendo estas actualizaciones, intenta evitar las expresiones coloquiales (si tu público objetivo no lo requiere) y huye de todo aquello que has decidido que tu marca no es según tus territorios.
Además, yo recomendaría que tampoco incluyeras opiniones fuertes cuando estás hablando de manera profesional, y que trataras de ser justo eso: lo más profesional posible.
Y me diréis: ¿cómo se hace esto que nos has contado? Pues la mala noticias es que para hacer esto vais a tener que hacer una cosa que (a priori) da bastante pereza y que es tener dos perfiles separados. Separando ambas cuentas vas a poder centralizar todas las actualizaciones profesionales y enfocarlas al cumplimiento de tus objetivos, mientras que puedes dejar tu perfil personal como un «patio de recreo».
Ojo, separando los dos perfiles no vas a tener carta blanca para hacer lo que te dé la gana porque en tu perfil personal puede que estés identificado como un miembro de tu marca, como me sucede a mí. Pero sí que es verdad que tus seguidores sabrán a qué atenerse en cada una de las cuentas: en mi caso, quienes me siguen con el perfil de Patricia Tablado saben que hablo de muchos temas, pero que en los perfiles de Community Madre me dedico sobre todo a hablar de social media, de comunicación y de medios online.
Con esto y un bizcocho ¡hasta 2018!