Una de las dudas que más me transmiten mis clientes es en qué redes sociales deberían estar. Mi consejo depende del objetivo que tengan, del público al que quieran llegar, del contenido que quieran compartir y del presupuesto que tengan, pero lo cierto es que Facebook suele ser la red que más recomiendo.
En Facebook tenemos al 95% de las personas que usan Internet, y, aunque es posible que tener un perfil en una red social no implica automáticamente que la usen, que la usen a diario o siquiera que se pasen por ella de vez en cuando, tenemos muchas posibilidades de alcanzar a más personas, incluso a aquellas más escépticas. Por lo tanto, en una buena estrategia de redes sociales tiene que haber hueco para Facebook casi obligatoriamente (ojo, este post está escrito en junio de 2017 y es posible que el año que viene esta situación haya cambiado, aunque no lo veo probable).
Las grandes audiencias están en Facebook
Crear contenido para Facebook es como poner un anuncio en Telecinco: es la cadena que más público tiene (aunque no todos los que la ven admiten hacerlo), y aunque sea de refilón hay más posibilidades de llegar a un mayor conjunto de la sociedad. ¿Tu producto está dirigido a señores de más de 50 años? Aquí hay más que en LinkedIn (y es probable que lo usen más). ¿Buscas mujeres urbanas, de unos 30 años? Complementa tu estrategia de Instagram con Facebook, donde llegarás a un perfil más amplio.
Crea contenido nativo para Facebook
Una de las ventajas de esta red social es que permite crear contenido nativo en muchos formatos: puedes subir vídeos directamente a su plataforma, cosa que hará que aumente el alcance; puedes crear notas que funcionan como posts en un blog e incluso puedes crear álbumes o emitir vídeos en directo.
Como ya os he contado en otra ocasión, ojo a fiarlo todo a Facebook. Recordad que vuestra web es vuestra web y cuanto más contenido creéis en ella, más seguros estaréis de tener en vuestras manos las mejores cartas. Crear contenido para las redes está bien pero estáis a merced de algoritmos o de que cambien las normas. Además, la mayoría de ventas se realizan en vuestra home, así que, ¿por qué sacar fuera a vuestros clientes potenciales?
Aprovecha las promociones y la publicidad de Facebook
He probado a hacer campañas en Twitter, en Instagram y en Facebook y es en esta última red social en la que me funcionan mejor con mucha diferencia. Gracias a las posibilidades de segmentación y a poder promocionar distintos posts puedo ajustar presupuestos muy pequeños para alcanzar a una gran cantidad de personas.
Segmenta contenido adecuado para cada público
¿Sabías que Facebook te deja crear varias versiones de una misma actualización para que cada uno vea solo la que mejor va a recibir? Puedes elegir que una actualización solo la vean mujeres, o que la versión que reciban los que hablan en inglés sea distinta a la que ven los que hablan en castellano. Esto es muy útil cuando tienes distintas estrategias para llegar a cada target, y facilita acertar más con el contenido.
Habla con tu público de tú a tú
Puedes configurar tu página de Facebook para recibir mensajes privados en los que tu público te puede preguntar sus dudas. Activando esta posibilidad, a los visitantes de tu página les saldrá un pop up (de los que no molestan) en el que te pueden contar sus dudas acerca de las tallas, de los envíos o acerca de detalles de tus servicios.
Ojo que si activas la posibilidad de recibir mensajes tienes que hacerte responsable de responderlos, ya que Facebook indica si estos se responden y en cuánto tiempo. En cualquier caso no te obsesiones porque nadie está el 100% del tiempo atento y hay dudas que no se responden en pocos segundos porque tienes que consultar datos con diferentes personas.