Vivimos en un mundo hiperconectado en el que la competencia está a un golpe de ratón de distancia, y en el que diferenciarse de la competencia es vital, sobre todo cuando hablamos de redes sociales en las que pasamos el 80% del tiempo online, como es el caso de Facebook. Hoy quería echaros una mano con eso tan fácil pero a la vez tan difícil como es destacar entre la multitud, tengáis muchos o pocos recursos.
Diferénciate de la competencia por tu personalidad
Piensa en cuál es la personalidad de tu marca y refuérzala. Ya hemos hablado de que en la estrategia de contenidos es fundamental determinar cuál va a ser el tono de la comunicación. Si nuestra marca habla con la voz de un adolescente no mandará los mismos mensajes de si pensamos que es una abuela que está contando las recetas a sus nietos.
No quiero decir que la marca pertenezca a un adolescente o a una abuela, pero sí que tenemos que hacer siempre el ejercicio de decidir quién va a ser ese interlocutor imaginario que va a hablar a nuestros seguidores. Y por supuesto, procurar que sea una «persona» con la que se puedan identificar o con la que empaticen.
Diferénciate de la competencia por tus códigos visuales
Cuando estás creando una marca, siempre te preguntan cuáles son tus colores, qué tipografía vas a usar y cuáles van a ser tus códigos visuales. Esto sirve para que alguien cuando vea una de tus publicaciones sepa que es tuya. Por ejemplo, no hace falta leer la marca para saber que esto es un contenido que ha generado Coca-Cola:
Sé que me vais a decir que Coca-Cola tiene un muchillón de dólares y puede hacer las creatividades que le parezcan, pero si os paráis a reflexionar, seguro que en vuestro entorno tenéis los elementos para hacer una foto equivalente a coste cero. Fijaos cómo han elegido unos colores para la fotografía que son los de su marca y que su producto aparece pero no en primer plano. No nos lo están «metiendo por los ojos» y sin embargo nuestra vista se va a la lata.
Diferénciate por lo que dices
De nuevo, vuelvo sobre un tema que me encanta, el de los mensajes que son intercambiables entre muchas marcas. Basta ya de repetir los dibujos de Mr Wonderful, que igual te valen para vender cremas, azulejos o sombreros. Basta ya del mensaje de «¡a por la semanita!» de cada lunes o de usar la palabra juernes. Por favor, dejad de usar la palabra juernes a no ser que tengáis 20 años, seáis universitarios y en efecto el viernes no tengáis obligaciones.
Haz que tu comunicación sea memorable y que mueva a quien lo lea a hacer algo, ya sea comprar tu producto, mejorar su utilización o que le saque una sonrisa porque le ha hecho un poquito más feliz. Pero por favor, que sean mensajes auténticos y que no sean de esos que podría poner tu competencia, tu pescadero o tu fisioterapeuta sin necesidad de cambiar una coma.
Diferénciate por cómo lo dices
¿Quién dijo que los vídeos son los reyes de Internet? A lo mejor tu marca se encuentra más cómoda siendo un dibujo, como en los posts que hace Remorada. O es una combinación de dibujo y foto como en estos de @cintascotch en Instagram:
Sea cual sea la manera con la que te comunicas con tus posibles clientes, asegúrate de mantener siempre tu estilo y pronto llegarás a ser reconocible por él. Sé consistente. Lo que me lleva al último punto:
Diferénciate porque eres tú
¿Quién mejor que tú para contar tus historias? No me refiero a tú-tú, esa persona que sabe eructar el abecedario y que se hurga la nariz cuando no mira nadie*. Me refiero a que encuentres la personalidad que quieres transmitir en Internet y que vayas a muerte con ella. ¡Sal a quemar Internet porque no hay nadie como tú en todo el mundo!
*bueno, a no ser que tu marca vaya de eructar y/o hurgarse en la nariz, pero si es así me encantaría conocerla así como vuestros planes de comunicación.